Los errores en el texto son imputables a los autores, pero su eventual escasez se debe a las cuidadas revisiones de Javier Tabarés y Rubén López. Mientras Javier Tabarés elaboró tres hojas de cálculo Excel con consideraciones de todo tipo (técnicas, filosóficas y conceptuales), Rubén López redactó una Guía de Fallos y Acotaciones que ocuparía varios volúmenes.
Javier Tabarés aparecía en los índices onomásticos justo al lado de Shirley Temple, pero sus protestas le permitieron acabar con las Sweet Inspirations. Este chico está curado.
La historia de Rubén no es menos interesante. En la última de las largas conversaciones telefónicas para pulir detalles se escuchaban al fondo los aullidos de dolor de su mujer, que estaba de parto. Los autores sufrían casi tanto como la parturienta, pero un dato sobre Platania que desconocía esa enciclopedia andante le llevó a prolongar la charla. La madre rompió aguas ante la angustia de los interlocutores y, una vez zanjada la cuestión sobre el guitarrista, muy pronto asomó su cabecita la bella Aryan López.
La entrega de Pati y Alberto a este libro no se puede contar aquí. No hay palabras suficientes y además no se puede expresar. Aquí se pueden ver otras portadas que finalmente fueron decartadas, a pesar de la preferencia de sus autores.
El mismo día en que Editorial Fundamentos aceptó nuestro proyecto se recibieron otras dos ofertas editoriales. Una de Barcelona y otra de Madrid. La entrega al proyecto de Paula Serraller, su profesionalidad y su trabajo perfeccionista en la edición, nos confirmaron que la elección fue todo un acierto.
La foto prevista para la portada es la que aparece como apertura del capítulo ocho, pero su autor, Mike Maggid, demoró su entrega por razones bancarias que demuestran su total adaptación a los nuevos tiempos.
El ordenador cascó en dos ocasiones, la última el día en que había que entregar los textos.
Estaba previsto incluir una línea del tiempo (recurso que permite la ayuda a la lectura en volúmenes de considerable tamaño), que iría en la página posterior de cada apertura de capítulo, pero la amplitud de los índices nos hizo desistir de la idea.
|
Volver a 
